Katy Perry, una novia inesperada



Todos hemos oído hablar de Katy Perry, ya sea por su música, por su papel como jueza en American Idol, o, simplemente, por haber visto su nombre en las noticias. Y es que a no ser que hayas estado viviendo debajo de una roca, apartado del resto del mundo durante los últimos 20 años; ya deberás conocer algo sobre la artista.
Precisamente, por la ajetreada vida que llevaba la cantante, que ya cuenta con unos 35 años, nadie se esperaba la noticia que se confirmó el 5 de marzo de 2020. Si no te has enterado todavía, ¡Katy Perry está embarazada! Y sí, se trata de una hija que ha surgido del romance con Orlando Bloom, tras ambos estar comprometidos desde el 2019 y estar juntos desde 2016.
Hemos de reconocer que ha tenido un gran efecto en redes, y hasta nosotros nos hemos quedado sorprendidos. Y es que Katy Perry no ha revelado nada hasta la publicación de su canción Never Worn White, donde, precisamente, se puede observar al final del videoclip a la cantante con la barriga más grande de los habitual, confirmando así los rumores de su embarazo.
Hoy nos interesa analizar esta canción, ya que se trata de algo muy especial para Katy Perry. Con esta canción, no sólo se refiere a el nacimiento de su hija (que será durante el verano), sino también la publicación de su nuevo álbum (que será alrededor de esa fecha).
La letra dice así:
[Verse 1]
You love the hell out of me
And Heaven's where we could be
I've stood on the edge of love
But never took the leap
And you took my armor off
And did it delicately
And I let my guard down
To show you what's underneath


[Pre-Chorus]
Thank God that you were man enough to come
Answer my mama's prayers
You asked the question, I said, "Yes"
But I'm scared

[Chorus]
'Cause I've never worn white
But I wanna get it right
Yeah, I really wanna try with you
No, I've never worn white
But I'm standin' here tonight
'Cause I really wanna say "I do"
I do


[Verse 2]
See us in sixty years with a full family tree (I do)
Give my blood, sweat, and tears to reach our destiny (I do)
'Cause love is a minefield, let's take this war, baby (I do)
'Cause at the end of it all, I choose you and you choose me (I do)


[Pre-Chorus]
Thank God I was woman enough to come
Answer your father's prayers
You asked the question
I could tell you were scared

[Chorus]

[Bridge]
Now let's dance with each other (Dance with each other)
Mixing all of our colors
It's so easy to surrender
When you finally find forever

[Chorus]

[Outro]

En la canción, podemos observar cómo Katy Perry se dirige a Orlando Bloom, explicando lo que siente por él y cómo parece ser la única persona que ha conseguido que sienta algo diferente al resto de personas con las que ha estado (“I've stood on the edge of love. But never took the leap”). Además, haciendo referencia a su boda con Russell Brand en 2010, en la cual llevó un vestido gris (cuando es tradicional que las novias vayan con un vestido blanco en su boda) dice lo siguiente: “'Cause I've never worn White. But I wanna get it right. Yeah, I really wanna try with you”.

Con esto último, creemos que Katy Perry se refiere a una relación de las que se puede ver en las películas y en los libros, algo que quizás ella llegó a creer que no existía. Esto se hace más claro cuando dice los siguiente: “See us in sixty years with a full family tree (I do). Give my blood, sweat, and tears to reach our destiny (I do)”. Se trata de uno de los clichés más recurrentes de la historia de la música y que, sin embargo, han llegado a convertirse en realidad.

Es interesante el diseño de la portada de la canción, así como el videoclip de este (puedes verlo aquí). La canción en sí comienza con una suave melodía que suele ser la que utilizan tradicionalmente en las bodas cuando entra la novia a la iglesia para casarse.


Además, a lo largo de la canción, Katy Perry lleva dos atuendos. Uno de ellos es un vestido rosa, que junto a su pelo y maquillaje le dan un aspecto muy dulce y bonito. El otro, es un tipo de atuendo lleno de flores de colores, que también lleva en el pelo. Desde The Datsuzoku creemos que el primer vestido puede representar la maternidad, o un momento de inocencia y debilidad de Katy Perry al rendirse al amor que siente por su pareja. Por otro lado, pensamos que el atuendo de flores representa el compromiso consolidado con Orlando Bloom.



Como ocurre con la letra de la canción, parece que Katy Perry se dirige a Bloom al decir que “sí, sí quiero” (refiriéndose a casarse con él), pero, a pesar de que quizás trate de convencerlo a él, nosotros pensamos que puede que sea una forma de explicarle a los fans lo que verdaderamente significa para su relación con Bloom.

Desde The Datsuzoku les deseamos lo mejor, y no podemos esperar más emocionados el nacimiento de su hija. 








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